EUROPA
PRESS
5 septiembre
2019
Oler
a limón te hace sentirte más delgado
El aroma a limón puede ayudar a las
personas a sentirse mejor con su imagen corporal, según ha puesto de manifiesto
un estudio llevado a cabo por científicos de la Universidad de Sussex (Reino Unido) y que ha sido presentado en el
encuentro 'INTERACT 2019'.
La investigación, realizada en colaboración con
investigadores del Centro de Interacción de la Universidad de Londres (UCLIC) y
la Universidad Carlos III de Madrid (UC3M), también ha puesto de manifiesto que
las personas se sentían más gordas cuando olían a vainilla.
"Nuestro estudio muestra cómo el sentido del olfato
puede influir en la imagen que tenemos en nuestra mente de nuestro cuerpo y en
los sentimientos y emociones hacia él. Ser capaz de influir positivamente en
esta percepción a través de la tecnología podría conducir a terapias novedosas
y más efectivas para las personas con trastornos de la percepción corporal o al
desarrollo de ropa interactiva y tecnología portátil que podría usar el olor
para mejorar la autoconfianza de las personas y recalibrar los sentimientos
distorsionados del peso corporal", han dicho los expertos.
El proyecto de investigación se basa en investigaciones
recientes en neurociencia cognitiva e interacción humano-computadora (HCI), que
revelaron que la tecnología puede cambiar la percepción de la imagen corporal
(BIP) de las personas al estimular una variedad de sentidos.
El experimento consta de dos estudios consecutivos. En el
primer estudio, los participantes se sentaron frente a una pantalla de
ordenador mientras recibían estímulos olfativos y luego se les pidió que
calificaran el olor percibido usando una escala visual analógica que lo
comparaba con siluetas del cuerpo puntiagudas o redondeadas, calientes o frías,
altas o bajas y delgadas y gruesas siluetas del cuerpo
En el estudio de seguimiento, los participantes se sentaron
sobre una tabla de madera, usando audífonos, un par de sensores de captura de
movimiento y el dispositivo basado en el zapato que mejoró el tono de sus
propios pasos.
Los participantes recibieron instrucciones para caminar
sobre el terreno mientras se liberaban los estímulos olfativos y luego se les
pidió que ajustaran el tamaño de un avatar tridimensional utilizando una herramienta
de visualización corporal de acuerdo con su percepción de sí mismos. También
respondieron un cuestionario sobre la velocidad percibida, los sentimientos
corporales y las emociones.
Los investigadores descubrieron que el aroma a limón hacía
que los participantes se sintieran más ligeros, mientras que el aroma a
vainilla los hacía sentir más pesados. Estas sensaciones se mejoraron cuando se
combinaron con sonidos agudos y sonidos bajos de los pasos de los
participantes.